Manifiesto leído en el Tercer Paseo Una Ciudad para Todos.
Hace ya 3 años que ante el añejo problema de accesibilidad que sufren
diariamente los peatones en nuestra ciudad, las tres entidades que
conforman la Plataforma Una Ciudad Para Todos decidimos unir nuestras fuerzas. Así, Vida Independiente Andalucía, Usuarios de Perros Guía y Peatones de Sevilla venimos desde entonces realizando juntos diversas acciones. Una de ellas es el Paseo Una Ciudad Para Todos,
con el que intentamos mostrar a quienes nos acompañan durante el
recorrido, la infinidad de obstáculos que se nos presentan diariamente.
Hoy hemos realizado nuestro
Tercer Paseo, formando parte además de la magnífica iniciativa que
Janes Walk Sevilla está llevando a cabo este fin de semana en la ciudad y a la que nos sentimos honrados de pertenecer.
Recapitulando muy brevemente, de los dos paseos que realizamos en
años anteriores únicamente se ha resuelto un rebaje en La Campana, que
por cierto se elimina en días previos y durante toda la Semana Santa,
para mayor beneficio del negocio de las sillas de alquiler. No tenemos
noticia de ninguna otra mejora.
La Accesibilidad Universal, el Diseño Para Todos,
aunque puedan parecer solo palabras técnicas, son expresiones llenas de
contenido humano. Nos hablan del derecho de las personas a pasear,
transitar o deambular por la ciudad hacia donde quieran y por donde
quieran. Es por lo tanto un derecho básico y su falta conlleva exclusión y discriminación hacia las personas que la padecemos, que nos obliga a transitar en continuo peligro para nuestras vidas.
Nos encontramos pues ante un grave problema enquistado en nuestra
ciudad, esta ciudad a la que también pertenecemos y a la que también
contribuimos con nuestros impuestos.
Añadida a la vieja tendencia de no incidir sobre la infinidad de puntos negros que hacen inaccesibles los itinerarios peatonales,
observamos con alarma cómo proliferan los obstáculos en los itinerarios
peatonales o cómo cada vez más se nos obstaculiza el acceso a espacios
como los baños adaptados de muchos locales. Es más, con total impunidad
se nos da otra vuelta de tuerca con la concesión de nuevas licencias a negocios inaccesibles de nueva apertura e incluso se permiten obras de reforma que convierten en inaccesibles muchos negocios a los que antes sí podíamos acceder. Sirva como botón de muestra la zapatería UlanKa en la calle Tetuán, entre un nutrido número de casos.
Pero aún peor si cabe es la constatación de la falta
de respeto a las normativas vigentes cuando son las propias
administraciones las que realizan obras de calles enteras sin respetar
los criterios de Accesibilidad Universal, como es el caso de la calle Jesús del Gran Poder que acabamos de recorrer o Tomás de Ibarra calle que visitamos en nuestro Paseo del año pasado.
Estas políticas incumplen gravemente leyes sobre accesibilidad de
ámbito estatal, autonómico y local. Además contravienen tratados
internacionales de obligado cumplimiento como la Convención de la ONU
sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Ya no hay excusas. Ni la crisis, ni la
idiosincrasia de la ciudad, ni los argumentos conservacionistas son
válidos ni razonables. Cantidad de ciudades de nuestro entorno nos
muestran diariamente que es posible compaginar la estética con la
accesibilidad sin que ello suponga coste añadido alguno. Han conseguido
romper viejas inercias mostrando un beneficio para toda la ciudadanía. En estos casos comerciantes y peatones manifiestan sentirse satisfechos. De manera que ante todo, debería estar la voluntad inequívoca de hacer ciudades amables para todas las personas.
Todas estas graves actuaciones municipales, nos han llevado a
solicitar el cierre de la Oficina de la Accesibilidad del Ayuntamiento de Sevilla,
una herramienta que debería haber servido para cambiar definitivamente
la situación de la accesibilidad universal en nuestra ciudad, a través
del control exhaustivo de todas las obras que se realizan en la misma, y
que, sin embargo, ha quedado reducida a una oficina simbólica, sin
presupuesto, sin personal y sin capacidad real para iniciar ese cambio.
Es por todo ello que desde esta Plataforma Exigimos a las autoridades competentes:
- Que replanteen sus políticas urbanas priorizando la Accesibilidad
Universal por delante de otros intereses, tanto públicos como privados,
respetando y cumpliendo las normativas vigentes sobre Accesibilidad.
- Exigimos así mismo que se depuren responsabilidades y se corrijan
las acciones no ajustadas a normativa, tanto en espacios públicos como
en los privados de concurrencia pública.
- Que se ponga en marcha el dispositivo necesario para asegurar la
Accesibilidad Universal tanto en espacios públicos como privados,
imponiéndose las sanciones que sean pertinentes.
Esta Plataforma reclama también el compromiso de toda la sociedad de forma que:
- Instamos a todos los partidos políticos a dar a esta cuestión la
importancia que merece, no sólo en sus programas sino en su actividad
diaria, exigiendo el cumplimiento de las normas y publicitando cualquier
acción que las contravenga.
- Pedimos a las entidades y grupos de acción ciudadanos, así como a la
ciudadanía en general que estén atentos ante cualquier situación que
pueda vulnerar el derecho a la accesibilidad, que lo hagan público y lo
denuncien llegado el caso.
Por La Accesibilidad Universal. Por una Ciudad para todas las Personas.