Texto Concepción Martín Imagen PDS
Eso fue lo que escribimos en la calzada el día 12 de diciembre de 2010, en que nosotros, los miembros de la Asociación de Peatones de Sevilla, participamos en la segunda Ciclovida que tuvo lugar en la Ronda Histórica entre la Pasarela y la Florida.
Jugar, según el diccionario de la Real Academia de la Lengua española, significa hacer algo con alegría y con el solo fin de entretenerse y divertirse, y esto fue lo que hicimos precisamente ese día. Por unas horas se cerró el tráfico a la circulación de vehículos a motor y las ciudadanas y ciudadanos sevillanos ocupamos el espacio público con total libertad, sin problemas de coches, sin miedo, siendo nosotros mismos y disfrutando del entorno con todas las personas que por allí paseaban y se acercaban , y pudimos respirar aire fresco y limpio, sin humos, sin contaminación y sin ruidos, frente a uno de los lugares más bonitos de Sevilla, como son los Jardines de Murillo.
Organizamos diferentes juegos dirigidos a los más pequeños como carreras de chapas, burbujas de jabón, salto al elástico, a la comba y al teje, que para nuestra sorpresa muchos niños y niñas desconocían. También realizamos un mural con tizas de muchos colores en medio de la calzada y dibujamos a Peatón Man, nuestro superhéroe y todas/os las niñas y niños que por allí pasaban se acercaban para pintar y colorear con nosotros. Cada cual dibujaba lo que quería, flores, casitas, animales, muñecos, incluso un grupo de patinadoras se pararon, cogieron tizas y pintaron un enorme patín de cuatro ruedas, como los que llevaban puestos, y lo colorearon. Fue una experiencia muy bonita y era muy gratificante ver como las familias disfrutaban todos juntos un domingo por la ciudad, como se reían y como los padres enseñaban a sus hijas/os esos juegos tan tradicionales que cualquier niña y niño debería conocer y que desconocen. Se veía en sus caras la satisfacción y la felicidad.
Las actividades en las casas han sustituido los juegos en las calles, ya que residir en las ciudades llenas de coches, con mucho tráfico y la falta de tiempo que todos tenemos, están limitando la posibilidad de fomentar los juegos al aire libre.
Todo esto ha motivado que poco a poco las/os niñas/os se vayan alejando de lo que es natural en el ser humano, que es jugar con otras niñas y otros niños, corriendo y disfrutando como hacíamos antes. Es una pena que todo esto se esté perdiendo porque contribuye al desarrollo personal, al mismo tiempo que reduce la obesidad infantil, uno de los grandes problemas del las/os niñas/os del siglo XXI.
Todavía recuerdo, como si fuera ayer, cuando jugaba con mis amigas/os en la calle a una gran variedad de juegos. Jugábamos a la comba, al escondite, al fútbol, al baloncesto, y a otros juegos que nos inventábamos nosotras/os misma/os, éramos bastante creativas/os, o que nos enseñaban nuestras madres, nuestros padres y nuestras abuelas y abuelos, y lo pasábamos fenomenal, eran buenos momentos, reíamos, nos divertíamos, a la vez que hacíamos nuevas y nuevos amigas y amigos.
El desarrollo físico, social y emocional del niño y la niña depende mucho de lo que los mayores seamos capaces de hacer con ellos, de lo que le inculquemos, del entorno en el que crezcan, de los hábitos de vida saludable que tengan y de lo que le hagamos reír y disfrutar, y por supuesto, que lo hagamos con ellos/as, en nuestra compañía, lo que a su vez permitirá fomentar las relaciones entre los padres y las madres y sus hijas e hijos.
Vemos muy positivo que se ofrezcan espacios públicos para recuperar el juego como experiencia de placer, participación y disfrute.
Os animamos a todas/os a participar en las Ciclovidas que tendrán lugar los días 16 de enero, 20 de febrero y 27 de marzo de 2011, y a que paséis unas horas en compañía de vuestros padres, amigos/as, abuelos/as e hijos/as, será una grata experiencia.
Eso fue lo que escribimos en la calzada el día 12 de diciembre de 2010, en que nosotros, los miembros de la Asociación de Peatones de Sevilla, participamos en la segunda Ciclovida que tuvo lugar en la Ronda Histórica entre la Pasarela y la Florida.
Jugar, según el diccionario de la Real Academia de la Lengua española, significa hacer algo con alegría y con el solo fin de entretenerse y divertirse, y esto fue lo que hicimos precisamente ese día. Por unas horas se cerró el tráfico a la circulación de vehículos a motor y las ciudadanas y ciudadanos sevillanos ocupamos el espacio público con total libertad, sin problemas de coches, sin miedo, siendo nosotros mismos y disfrutando del entorno con todas las personas que por allí paseaban y se acercaban , y pudimos respirar aire fresco y limpio, sin humos, sin contaminación y sin ruidos, frente a uno de los lugares más bonitos de Sevilla, como son los Jardines de Murillo.
Organizamos diferentes juegos dirigidos a los más pequeños como carreras de chapas, burbujas de jabón, salto al elástico, a la comba y al teje, que para nuestra sorpresa muchos niños y niñas desconocían. También realizamos un mural con tizas de muchos colores en medio de la calzada y dibujamos a Peatón Man, nuestro superhéroe y todas/os las niñas y niños que por allí pasaban se acercaban para pintar y colorear con nosotros. Cada cual dibujaba lo que quería, flores, casitas, animales, muñecos, incluso un grupo de patinadoras se pararon, cogieron tizas y pintaron un enorme patín de cuatro ruedas, como los que llevaban puestos, y lo colorearon. Fue una experiencia muy bonita y era muy gratificante ver como las familias disfrutaban todos juntos un domingo por la ciudad, como se reían y como los padres enseñaban a sus hijas/os esos juegos tan tradicionales que cualquier niña y niño debería conocer y que desconocen. Se veía en sus caras la satisfacción y la felicidad.
Las actividades en las casas han sustituido los juegos en las calles, ya que residir en las ciudades llenas de coches, con mucho tráfico y la falta de tiempo que todos tenemos, están limitando la posibilidad de fomentar los juegos al aire libre.
Todo esto ha motivado que poco a poco las/os niñas/os se vayan alejando de lo que es natural en el ser humano, que es jugar con otras niñas y otros niños, corriendo y disfrutando como hacíamos antes. Es una pena que todo esto se esté perdiendo porque contribuye al desarrollo personal, al mismo tiempo que reduce la obesidad infantil, uno de los grandes problemas del las/os niñas/os del siglo XXI.
Todavía recuerdo, como si fuera ayer, cuando jugaba con mis amigas/os en la calle a una gran variedad de juegos. Jugábamos a la comba, al escondite, al fútbol, al baloncesto, y a otros juegos que nos inventábamos nosotras/os misma/os, éramos bastante creativas/os, o que nos enseñaban nuestras madres, nuestros padres y nuestras abuelas y abuelos, y lo pasábamos fenomenal, eran buenos momentos, reíamos, nos divertíamos, a la vez que hacíamos nuevas y nuevos amigas y amigos.
El desarrollo físico, social y emocional del niño y la niña depende mucho de lo que los mayores seamos capaces de hacer con ellos, de lo que le inculquemos, del entorno en el que crezcan, de los hábitos de vida saludable que tengan y de lo que le hagamos reír y disfrutar, y por supuesto, que lo hagamos con ellos/as, en nuestra compañía, lo que a su vez permitirá fomentar las relaciones entre los padres y las madres y sus hijas e hijos.
Vemos muy positivo que se ofrezcan espacios públicos para recuperar el juego como experiencia de placer, participación y disfrute.
Os animamos a todas/os a participar en las Ciclovidas que tendrán lugar los días 16 de enero, 20 de febrero y 27 de marzo de 2011, y a que paséis unas horas en compañía de vuestros padres, amigos/as, abuelos/as e hijos/as, será una grata experiencia.